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El enigmatico regreso

Capítulo 429
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Capítulo 429 Intimidación

Al escuchar la noticia, Neera frunció el ceño. Ella rápidamente llamó a su tía.

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Adriana respondió rápidamente, su voz con un toque de alivio: “Neera, has regresado. Intenté llamar a

casa antes, pero la tía Zúñiga mencionó que no habías vuelto.

“Sí, acabo de llegar a casa”.

Neera preguntó preocupada: “¿No vienes a casa esta noche? ¿Como es ella?”

“No es gran cosa, pero necesito quedarme con ella. No te preocupes; Regresaré al amanecer”.

Adriana optó por no mencionar por teléfono sus planes de quedarse en la casa de los García,

pensando que sería mejor hablarlo en persona al día siguiente.

Aliviada por la noticia, Neera respondió: “Está bien, asegúrate de cubrirte con una manta cuando

duermas en el hospital. No quiero que te resfríes”.

A la mañana siguiente, cuando bajaron, vieron que tía Adriana había regresado a casa.

“¡Tía abuela, estás en casa!”

Los trillizos estaban llenos de entusiasmo cuando se apresuraron a abrazarla.

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Adriana sintió que su corazón se derretía con sus cálidos abrazos.

“Sí, pero tengo que irme pronto. Ustedes tres deben comportarse y no molestar a su mamá,

¿entiendes?

Esta noticia sorprendió a todos.

Neera preguntó apresuradamente: “¿A dónde vas?”

Impotente, Adriana respondió: “Tengo que quedarme en la residencia de García por unos días. No te

preocupes; es sólo temporal. Volveré una vez que mi madre se recupere”.

¿Cómo podía Neera no estar preocupada por ella?

Su madre tuvo un final trágico como resultado del acoso de esa familia en el pasado. Su percepción

de esa familia era abrumadoramente negativa. Para ella, esa residencia parecía un nido de tigres y

lobos.

Adriana siempre había sido una figura materna para Neera. La idea de cómo esa familia podría

explotarla para su propio beneficio la perturbaba profundamente.

Puede que alguna vez haya sido vulnerable, pero los tiempos habían cambiado; ella era más fuerte

ahora.

Neera no quería que a Adriana le sucediera ningún daño.

“Tía Adriana, ¿no puedes quedarte aquí? Aunque tienes que cuidar a tu mamá, ¿no puedes visitarla

durante el día y evitar pasar la noche allí?

Adriana, reconociendo las preocupaciones subyacentes de Neera, respondió con una cálida sonrisa.

“Niño tonto, sé lo que estás pensando, pero no soy alguien de quien se aprovechen fácilmente. No

dejaré que me

maltraten”,

Adriana era consciente del nudo en su corazón. Acarició suavemente su cabello y se dirigió

directamente a él.

“Conoces la verdadera naturaleza de esa familia. Son despiadados a la hora de alcanzar su objetivo.

Quieren que usted permanezca allí para crear una oportunidad para que su empresa y la de ellos se

fusionen. Si no estás de acuerdo, ¿quién sabe qué podrían hacerte? No me siento bien con que te

quedes con ellos”.

Sin embargo, Neera también reconoció que, dado el estado actual de Marnie, Adriana necesitaba

estar allí.

Después de pensarlo un poco, decidió: “Una vez que vayas allí, recuerda llamarme tres veces al día.

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Es la única manera de encontrar algo de paz”.

Adriana se rió entre dientes y estuvo de acuerdo.

Luego subió las escaleras para empacar algo de ropa y artículos esenciales, y luego bajó con el

equipaje.

Mientras Neera se dirigía a llevar a los trillizos a la escuela, decidió dejar a Adriana en la casa de

García en el

camino.

Media hora después llegaron a la villa.

Roxanne había estado esperando ansiosamente a Adriana en la entrada de la villa. Al verla, una cálida

sonrisa

floreció en su rostro.

“Se siente como si hubiéramos esperado años por tu regreso, y ahora finalmente estás aquí. Déjame

ayudarte con tu equipaje”.

Mientras hablaba, le lanzó a Neera una mirada sutil y triunfante.

Disgustada por el comportamiento de Roxanne, Neera ni siquiera se molestó en salir del coche.

Saludó a tía Adriana y se alejó rápidamente sin decir una palabra más.