Enamorándome de mi esposa provisoria

-De las ocho personas, conozco muy bien a dos de ellas.

-No está mal. En verdad conoces a alguien de la oficina del alcalde -comentó Kathleen.

-No son de la oficina del alcalde. Uno de ellos es Samuel, y el otro es Christopher. – John

miró con atención a Kathleen.

Kathleen se quedó sin palabras.

Nancy seguía sin poder comunicarse con el teléfono de Kylie. Parecia que esta última no

podría llegar a tiempo.

Justo entonces, Steve entró, mirando a Kathleen.

Kathleen se acercó rápido a él.

-No podemos encontrar a Kylie. ¿Puedes comprobarlo con el equipo de producción? Espero

que nada haya salido mal.

Steve hizo de inmediato una llamada telefónica.

Cruzando los brazos, Kathleen tomó los ingredientes que habia sobre la mesa. Si Kylie no

aparecia, todo su esfuerzo en la planificación del menu se iria al traste. En realidad, el

equipo de producción también habia preparado algunos ingredientes, pero no incluían

marisco.

Como lo mejor es que los platos se sirvan frescos, Kathleen ya había revisado antes todos

los supermercados cercanos.

Solo incluyó en su lista los ingredientes que se podían comprar en estos supermercados.

Nadie esperaba que Kylie no volviera después de tanto tiempo.

Sin embargo, Kathleen era consciente de que Kylie lo hacia a propósito para fastidiarla.

Steve también llamó a Kylie.

Sorprendentemente, la llamada se conectó en un instante.

La expresión de Nancy se atenuó ante eso.

«Parece que ignoro mi llamada a propósito, ¿eh?

-Kylie, ¿dónde estás? -Steve trató de no sonar impaciente».

Le había pedido que comprara los ingredientes en el supermercado. No debería tardar

más de una hora Sin embargo, hablan pasado dos horas y aún no había vuelto,

Steve oyó a Kylie sollozar incontroladamente al otro lado de la línea,

-Steve, me he torcido el tobillo. Puedes venir a recogerme? Ahora no puedo caminar.

-¿Dónde están los ingredientes? –pregunto Steve con ansiedad.

Kylie grito aun más fuerte:

-¡Estoy lesionada y lo único que te importa son los ingredientes!

Steve se quedo sin palabras mientras Nancy resoplaba.

Las ceias de Kathleen se juntaron mientras se sumía en profundas reflexiones. Ella

esperaba que ocurriera algo asi.

-Haré que el equipo de producción te recoja. -Steve no queria perder los nervios delante

de la cámara.

-Steve, ¿puedes venir tu en su lugar? El equipo de producción tiene sus reglas -le suplicó

Kylie a Steve.

Este ultimo se quedo sin palabras una vez más.

-Tardarás al menos una hora en llegar. Aunque consigas traer los ingredientes, no

llegaremos a tiempo. Ademas, los invitados ya están aqui -dijo Nancy.

-Hablare con el equipo de producción. -Steve colgó el teléfono y se volvió para mirar a

Kathleen con ansiedad– ¿Podemos prescindir del marisco?

-Está bien, pero habrá menos platos -respondió Kathleen.

-Hagamoslo entonces. No se me ocurre ninguna otra solución. -Vencido, Steve decidió

proceder sin usar mariscos.

«Deberia haber sabido que no debía dejar que Kylie comprara los ingredientes».

-¿Necesitan mi ayuda? -La voz de Samuel se escuchó desde la puerta de la cocina,

sobresaltando a los cuatro.

Samuel vio a Kathleen con un delantal, con un aspecto muy dulce y recatado. Curvo un

poco los labios. Sólo se mostraba cariñoso delante de ella.

Pronto, todas las miradas se dirigieron a Kathleen.

No fue una sorpresa, ya que Samuel era su exmarido.

-No -respondió Kathleen con frialdad.

Nancy habló entonces con voz mansa.

-Sr. Macari, Kate necesita marisco para algunos de los platos de esta noche. ¿Puede…?

De inmediato, Samuel se volvió hacia Kathleen y le pregunto:

-¿Qué necesitas? Haré que lo entreguen aqui en media hora.

Sólo tenia ojos para ella.

Kathleen sintió que su cabeza palpitaba.

-¿Kate? El espectáculo es más importante-susurro John.

Kathleen se mordió el labio.

– Necesito gambas, langostas y abulón.

-Entendido. -Samuel asintió mientras sacaba su teléfono-. Ve a comprar algunas gambas,

langostas y abulón. Envialos.

Colgo el teléfono y dijo con amabilidad:

-Lo entregarán todo en veinte minutos. No dudes en decirme que más necesitas.

Kathleen le echó una mirada. Se dio cuenta de que sus ojos eran tan cautivadores como

siempre. Mientras tanto la sección de comentarios se convirtió en un frenesi.

[Siento que mis rodillas se debilitan con sólo mirar los ojos de Samuel. Sin

embargo,iparece tan inexpresivo!]

[Creo que Samuel no ha superado a Kathleen. Todavia la ama.]

[Samuel debe seguir amando a Kathleen. Fue idea de Kathleen divorciarse en aquel

entonces.]

[No digas tonterias si no sabes la verdad. Ahora están divorciados. Samuel está viendo a

otra mujer.]

l¿Otra mujer? ¿Habrá una boda?]

[Es un hecho conocido que a Samuel le gusta Nicolette, la hija ilegitima de la familia

Yoeger. Todo el mundo en Jadeborough lo sabe. No es nada nuevo.)

L¿No ha desaparecido Nicolette durante un año? ¿Ha dejado el pais? ¿O está retenida en

casa por Samuel?]

[Eso no es posible. Cuando Samuel se casó con Kathleen, le dijo a todo el mundo que

Kathleen es la que le gusta. Me entere de que Nicolette tuvo un accidente y ahora está

lisiada.]

[Como sea, estoy apoyando a esta pareja para que vuelvan a estar juntos.)

Creo seriamente que Samuel todavía la ama, pero Kathleen no es consciente de ello.]

liBuena suerte, Samuel y Kathleen!

Kathleen se dio la vuelta y empezó a preparar la comida.

Al ver eso, Samuel esbozo una sonrisa de complicidad y se alejó.

Quince minutos después, Tyson llegó con los ingredientes

-Sra. Macari, estas son las cosas que pidió. -Tyson se dirigió adrede a Kathleen como «Sra.

Macaris,

Kathleen le miró con asombro sin palabras.

Tyson se disculpó entonces:

-Lo siento. Ha sido un lapsus. Tendre más cuidado la próxima vez. Sra. M-Um… Sra.

Johnson, estos son los ingredientes que necesita

-Gracias! -Kathleen pronunció cada palabra entre dientes apretados.

Después de eso, Tyson se fue a toda prisa.

Kathleen tomó un cuchillo de cocina y cortó la cabeza de un langostino de un solo golpe,

imaginando que era la cabeza de Tyson,

En ese momento, una suave voz llamó.

-¿Kate?

[¡Vaya! El exmarido se acaba de ir, y su prometido ha llegado. ¡Esto se está poniendo muy

emocionante!)