Capítulo282
En la cena, Pol preparó un plato de atún al estilo omakase japones para Clara, lo cual coincidió con
su personalidad.
El fresco atún de aleta azul estaba suave y delicioso, la tempura estaba crujiente por fuera y tierno
por dentro, y el oplegnathidae también era muy fresco y suave. En resumen, no hubo un solo plato
que no fuera una exquisitez.
Después de disfrutar de la deliciosa comida y beber un poco de vino, la señorita se llenó de energía
y comenzó a hablar mucho.
Pol era una persona erudita y conocedora de muchos saberes, y resultaba que Clara también lo era.
Hablaron de literatura, música y juegos, casi no hubo tema que el señor Garcia no pudiera seguir.
Sin embargo, lo que más la sorprendió fue que ambos habian jugado un juego asimétrico de
enfrentamiento en primera persona, ¡y ambos preferian jugar como el asesino!
Clara hablaba apasionadamente sobre los juegos. Su rostro delicado se sonrojaba y sus manos
blancas se movian en el aire mientras hablaba, volviéndose cada vez más emocionada.
Pol no la interrumpia, respondiendo adecuadamente a sus palabras, y sus ojos brillaban con una
sonrisa de cariño.
Una vez saciados y satisfechos, ambos salieron juntos del restaurante.
Aunque habían disfrutado de la velada, Pol no mencionó el tema de la colaboración en ningún
momento, simplemente charlaron amistosamente, lo que hizo que Clara se sintiera un tanto
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Justo cuando estaban a punto de separarse, ella estaba a punto de mencionar el asunto, pero el
hombre parecía leer su mente como si tuviera poderes psíquicos y se adelantó: -Señorita Pérez,
en cuanto estén listos para presentar el plan de colaboración para el jardín de rosas, pueden
enviármelo en cualquier momento. Una vez completemos el proceso, podremos formalizar el
contrato.
– Señor García.
Clara hizo una pausa, hablando con voz suave: -En realidad, hoy no elegiste a la familia
Hernández, sino cooperar conmigo. Sé que tal vez quieras hacerme un favor y hacer que Alejandro
se sienta un poco humillado.
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Pol no confirmó ni negó, solo la miró con una sonrisa tenue.
-Los negocios no son un juego, todos buscamos intereses y debemos considerar nuestros propios
beneficios. Espero que usted trate este asunto con seriedad y no deje que relaciones personales
afecten su juicio sobre la elección de socio para la colaboración.
Aunque tengo diferencias con Alejandro, soy una persona justa y honesta, no intimidaría a nadie. En
cuanto a la colaboración con el jardín, si él también quiere participar, entonces espero que pueda
revisar nuestras propuestas al mismo tiempo, seleccionar al lado más destacado y competir
de manera justa.
Desde que Clara salió del jardín hasta ahora, su mente no había parado un instante de pensar en
esto.
Ella pensó en este asunto de un lado a otro y finalmente sintió que no era apropiado colaborar con
Pol de esta manera.
Si el Grupo Hernández cometió un error y ella aprovechó esa oportunidad para tomar lo que le
corresponde, sería completamente justificado. Pero si ella lo obtuvo a través de su relación con Pol,
se sentía incómoda, como una trepadora de oportunidades.
Esto iba en contra de la personalidad de Clara. Como alguien fuerte y decidida, nunca dependería
de ningún hombre.
Pol la miró profundamente a los ojos claros y asintió con una sonrisa: -Sí, tienes razón.
– Incluso si él presenta una propuesta, seguiré eligiéndote.
-Vaya, parecía que todas las palabras que dije antes fueron en vano- Clara acoto.
-Señorita Pérez, entiendo lo que quieres decir.
Pol entrecerró los ojos. Su voz estaba empapada de una suave ternura como la luz de la luna–Pero
cada persona tiene su propia forma para hacer las cosas. Mi forma de hacer las cosas es colaborar
con personas conocidas. No estoy familiarizado con Alejandro, así que por esta simple razón no lo
elegiría.
Pero, Señorita Pérez, te conozco desde hace mucho tiempo, nos entendemos a la perfección desde
el primer encuentro, por eso te elijo a ti.
Los ojos hermosos de Clara parpadearon y giró la cabeza con cierta incomodidad.
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Era extraño, las palabras de Pol no eran inapropiadas en absoluto, ¿por qué sonaban como una
declaración de amor apasionada, haciéndola sentir tan avergonzada?
-Bien, dado que el Señor García me tiene en tan alta estima, no defraudaré tu amable intención. Estoy
ocupada con asuntos de mi propio hotel en estos días, por lo que la propuesta puede demorar un
poco. Espero que puedas comprenderlo. -Clara ya no tenía preocupaciones y mostró
una actitud cortés y considerada hacia la colaboración.
-No hay problema, puedo esperar el tiempo que sea necesario.
Pol personalmente le abrió la puerta del coche -Hace frío por la noche, regresa a casa pronto.
Clara le saludó con la mano en despedida y justo cuando se sentó en el auto, el hombre se inclinó
hacia abajo, inclinó la cabeza y la miró desde afuera hacia adentro por la ventana.
-Señorita Pérez.
-Señor Garcia, ¿hay algo más? -Clara parpadeó con sus claros ojos.
-Hoy en el jardín, el caballero Hernández me buscó para hablar en privado. ¿No estás curiosa
sobre lo que discutimos?
Pol había estado esperando todo el tiempo durante la cena para que Clara mencionara este asunto,
pero hasta ahora ni siquiera había insinuado una palabra.
Realmente, tenía mucha paciencia.
-No tengo interés en saberlo.
–
La sonrisa de Clara era radiante y despreocupada, con sus hoyuelos delicadamente dibujados:
Alejandro y yo ya no tenemos ninguna conexión. Lo que él diga ya no tiene relación conmigo. Me
despido, Señor García.