Capítulo 128
Evrie nunca imagino que él diria eso. Agarraba el boligrafo con tanta fuerza que las puntas de sus dedos se habian vuelto blancas.
Su corazon, sin razon aparente, comenz6 a latir mas rapido y, tras un largo silencio, finalmente le hablé: —Solo soy un juguete para ti, no tengo derecho a estar celosa de tus otras mujeres, Dr. Farel, no te burles de mi. —
— Un juguete que viene cuando lo Ilaman? Entonces, ,por qué no subes ahora que te he llamado varias veces? — le pregunté Farel con una risa fria.
Evrie morsu lay le dijo con voz apagada: —Dr. Farel, en serio, nosiento bien, déjen paz. — Su voz era suave y triste, con un leve tono de resignacion. Era evidente que no queria verlo.
Farel bajé la mirada, observo la pequefia tienda entre las piernas y suspird.
Esta bien—, le dijo. —No subas. Evrie guard6 silenpor un momento y luego colg6 el teléfono sin hacer ruido. Farel.. — Todavia decia que no estaba celosa, pero gcuando se habia atrevido a colgarle asi? Farel respiré profundamente y volal bapara darse una ducha fria. En realidad, no habia considerado los sentimientos de Evrie.
Ahora que Olivia estaba en el mismo piso, era complicado para Evrie subir. A él no le importaba, pero si Olivia la veia, seguramente la atacaria.
Los pequefios planes de Evrie palidecian frente a Olivia. No sabia cuando empezo a preocuparse inconscientemente por sus sentimientos. Se sentia realmente extrafo.
Follow on NovᴇlEnglish.nᴇt..copy right hot pub
En los dias siguientes, Evrie se mantuvo ignorando a Farel.
Se iba al trabajo apenas amanecia y no regresaba hasta el anochecer. Por cuestiones laborales, pasaba mas tiempo con Leandro.
También a Farel y Olivia en el jardin debajo del hotel. Olivia era alta y esbelta, con su largo cabello ondulado y rubio, y su vestido de tirantes con aires exdticos dejaba al descubierto su espalda que brillaban bajo el sol.
Incluso Margarita, la hija del subdirector Santos, palidecia ante su presencia y no podia igualar su aura aristocratica. Parecian una pareja perfecta, bafiados en la luz del sol.
Evrie se puso su mascara en sileny tomdé un camino mas largo para ir a trabajar.
Al pasar por el vestibulo del hotel, casi choco con alguien. Al levantar la vista, a Margarita.
—Qui€n iba a pensar que era la Srta. Evrie, tan descuidada. Pareces perdida, cualquiera diria que has sufrido una desilusion amorosa—, le dijo Margarita con una ceja levantada y una sonrisa triunfante.
Evrie sabia que Margarita estaba ahi para burlarse, asi que trato de esquivarla y seguir su camino.
—No te vayas. Si vas a trabajar tan temprano, seguro que no has desayunado. ¢Por qué no te unes al Dr. Farel y a los demas? — Margarita la desafid descaradamente.
Aunque no podia tener a Farel, no le importaba humillar a Evrie.
Para ella, Olivia era la joya de la familia Da Silva, pero qué era Evrie comparada con ella? ~Como se atrevia a competir por el mismo hombre?
Evrie palidecid. —Hazte a un lado. —
Evrie la miré fijamente. —Tu ambicion hacia Farel estos Ultimos dias no ha sido menor que la mia. Nosotras dos estamos en el mismo barco, 4no es asi? —
Margarita frunel cefio.
— Estas diciendo que somos iguales? —
Margarita se oscurecid. —estas amenazando? — El orgullo de Margarita se desvaneen un instante.
La familia de Olivia era de las mas prestigiosas en Alnorter, solo superada por los Haro. Con un simple chasquido de sus dedos, podia arruinar la vida del padre de Margarita. Claro que Margarita entendia las consecuencias.
Follow on Novᴇl-Onlinᴇ.cᴏmNo podia creer que, una vez mas, la pequefia Evrie la habia manipulado.
—Mmn, ya veras, llegaran tus dias malos. —
Margarita grufid friamente y se alejé con el rostro tenso. Evrie observo su silueta retirarse, solt6 un suspiro de aliy se recompuso antes de dirigirse al side construcci6n.
Ya se habia acostumbrado a lidiar con Margarita, incluso lo hacia con cierta facilidad.
Por la noche, alguien toco a la puerta de Evrie.
Al abrir, una persona muy atenta le dijo desde afuera: —Buenas noches, sefirita, el sefior del cuarto 1603 la invita a subir. Dice que necesita hablar con usted. —
Evrie se qued6 perpleja, eso le parecié extrafio.
Farel siempre la contactaba por teléfono o mensajes, 4desde cuando enviaba a empleados a mandarle recados? —Esta bien, gracias. —
Una vez que el empleado se fue, Evrie reviso su movil y no encontré ningtin mensaje de Farel.
Pensativa, deciir a ver qué sucedia.
Cuando iba a tomar el ascensor, se percatd de que estaba en mantenimiento y que el otro tendria una larga espera, asi que opt6 por subir por las escaleras.
Justo al llegar a la entrada de estas, escuché una voz al teléfono, era el mismo empleado de antes. —Sefiorita Santos, ya la engafié para que subiera. Usted solo espere un poco y luego la podra acorralar facilmente. —
Con esas palabras, quedo claro que Evrie habia caido en una trampa.