Receta para robarle el corazón al Dr. Farel

Capítulo 403

En la antigua casa ya no quedaban muchas cosas.

Farel, agarrando una maleta en una mano y tomando la de Evrie con la otra, bajaba las escaleras. Victoria estaba justo sentada en la sala de estar tomando café cuando Farel la saludo.

—Mama, ya nos vamos. —

Al escucharle decir eso, el rostro de Victoria mostré un ligero descontento.

—Solo te has quedado una noche, tu casa matrimonial esta aqui, qué tanta prisa tienes por irte? — Extrafiaba a su hijo durante todo el afio, seria falso decirle lo contrario.

Sin embargo, el joven siempre fue un solitario, rara vez regresaba a casa y eso la dejaba impotente. Farel mantuvo su expresién serena: —Tengo que alimentar al gato. —

Victoria fruncié el cefio: —zAhora tienes un gato? Pensé que no te gustaban esas cosas, json tan sucias y dificiles de mantener! —

Farel le respondié: —Por eso prefiero vivir aparte. Si trajera al gato aqui, temo que tu y papa no lo van a soportar.—.

Luego afiadid: —El gato lo encontré en la calle, abandonarlo seria causarle un segundo dafio. —

Victoria se quedo sin palabras. Ese maldito mocoso, siempre dandole lecciones de moral.

Y ella no tenia argumentos para refutarle.

El Range Rover pronto se detuvo en el estacionamiento subterraneo de la casa del BarEl Magnético. Al regresar al apartamento, Farel uso su huella dactilar para abrir la puerta.

El gatito estaba acurrucado durmiendo en el sofa de la sala.

Al oir un movimiento, levant6 su pequefia cabeza, los y, aunque sorprendido, no se escondi6.

Después de dos dias sin verlos, su temperamento parecia haber mejorado un poco, incluso se acercé a frotarse contra las piernas de los dos.

Evrie le abrié una lata de comida con buen animo.

El gatito corrid hacia alla, devorandolo con sonidos de satisfaccién.

—Deberiamos ponerle un nombre, ,no? — le dijo Evrie, agachada junto a él.

Farel sin pensar le dijo: —Llamalo Rebelde...—

—jNo lo podemos llamar Rebelde! —

Evrie le interrumcon vergiienza.copy right hot pub

De lo contrario, cada vez que llamara a ese nombre, sentiria que era una burla hacia ella. Farel se callé: —Entonces elige tu. —

Evrie se qued6 sentada en el suelo, observando la espalda peluda del gatito que habia crecido bastante en los Ultimos meses, redondo y regordete, incluso algo adorable.

Extendid su mano para acariciarlo.

El gatito, después de terminar su comida, retrocedié con cautela dos pasos y le grufid a Evrie.

Con una ligera contraccion en la comisura de sus labios, le dijo sin palabras: —Llamémoslo Rebelde.—

Siempre estaba bufando.

iY aun encima agresivo!

Mientras Farel se servia un vaso de agua, le coment6 con ironia: —El es como tu, de mal genio, y nunca te acostumbras. — Evrie, con el rostro enrojecido, se defendid: —jNo es cierto, tengo muy buen temperamento! —

— Ah, si? — Farel le habl6é con un tono sombrio.

— No es asi? Hace tiempo que no discuto contigo, gpor qué todavia tienes esa cara de incredulidad? — Evrie se mostré indignada.

Farel tomo un sorbo de agua con calma y le dijo: —Sihaces caso en la cama aunque sea una vez, lo creeré. —

Evrie cerré la boca.

Si seguian asi, grealmente no se agotaria?

El matrimoya se habia consumado.

Pero el desorden en su cabeza no habia disminuido en absoluto.

Esa tarde, Evrie no salié de casa, incluso el gato fue confinado en la sala de estar.

Porque él dijo: —Tenemos toda la vida por delante. —

Los dias siguientes, su vida retom6 su rumbo normal.

El proximo mes comenzaria la época de lluvias y el proyecto tenia que acelerarse, asi que cualquier dia de retraso era peligroso.

Evrie se sumergié de lleno en el trabajo.

Antes de eso, se reuniéd con Tomeo.

Le explicd que necesitaba acelerar el ritmo, su energia era limitada y no tenia tiempo para entretener a Giselle. Luego se encontré con Simeon para solicitarle un nuevo mentor para Giselle.

Hablo con firmeza, ya no consideraba ni siquiera el hecho de que su padre fuera un importante patrocinador. Evrie se sintid avergonzada, pero no sabia cémo explicarle.

De hecho, no estaba usando a Farel para intimidar a los demas.

Sino que..

. el extracomportamiento de Giselle ya habia superado su comprensi6n. Para evitar problemas innecesarios, tenia que mantener su distancia con ella.

Tomeo sintid la actitud de Evrie y, aunque no insistid, accedié a que Simeon encontrara otro proyecto para que Giselle aprendiera.

Apesar de que trabajaban en la misma empresa, ocasionalmente se cruzaban.

Pero para Evrie, eso ya era suficiente.

Con tal de no entrar en la oficina de proyectos, el peligro se reducia a la mitad.

Ella estaba algo ocupada y salié con un poco de retraso.

Apagaba su computadora mientras hablaba con Farel por teléfono.

—Espércinco minutos mas, ya salgo.

—Esta bien, sin prisa.

Farel colg6 el teléfono, hizo un giro y se dirigié al frente del edifide la empresa.

Justo cuando aparcaba, se cruz6 con Giselle, que salia del trabajo abrazando su portatil.

Al ver su coche, Giselle se detuvo y se acercé para saludarlo.

— EI Sr. Haro vino de nuevo a buscar a Evi? Su relacién parece ser muy solida.

Farel alzo la mirada hacia el reloj, con un semblante imperturbable, sin entrar en la conversacion. —Entonces sigue esperandola, yovoy.

Giselle le dijo esto y se gird para irse.

—Sefiorita Rivera.

De repente, Farel la llamo.

Através de la ventana del coche, clavo su mirada limpia en ella, advirtiéndola con un tono de voz sereno pero firme. —Mantente alejada de Evrie.

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