Capítulo 88
Era una tarde calurosa, Evrie no podia dormir y se recosté en la cama leyendo el libro que Leandro le por un rato. La puerta de la habitacién se abrié y alguien entré, empujando un carrito con los utensilios para cambiar los vendajes. Pero no era la enfermera habitual que solia atenderla, sino una cara desconocida.
Desde el momento en que la mujer entrdé, Evrie no pudo apartar los ojos de ella; la recién llegada era bellisima, con una presencia que no era comun en una enfermera. No transmitia cercania, sino mas bien una especie de frialdad y altivez.
La mujer vestia una bata blanca y sus rasgos eran finos y luminosos. Empujo el carrito hasta la cama y mirdé desde arriba a Evrie, y con una voz apatica comenzo a hablar.
—Sefiorita Evrie, la enfermera tuvo un contratiempo y hoytoca a mi cambiarle los vendajes.— Evrie escucho sus palabras y no dijo nada, simplemente asintid en cooperacién. —Se lo agradezco.—
Con una leve sonrisa en sus labios, Margarita extrajo la aguja que Evrie tenia en el dorso de la mano, retir6 el frasco vay colgé uno nuevo con suero.
—Disculpe, sefiorita Evrie, pero no nos quedan mas agujas finas. Tendré que usar una mas gruesa, le dolera un poco, trate de aguantar.—
Follow on NovᴇlEnglish.nᴇtMargarita saco un juego de jeringas anestésicas de mayor grosor de su carrito y habilmente las desempaqueto para prepararse para administrarlas.
Evrie estaba confundida.
La aguja que tenia antes estaba perfectamente bien, pero Margarita la habia retirado para usar una mas grande. Algo no cuadraba.
Antes de que pudiera reaccionar, Margarita ya habia clavado la jeringa en la parte dorsal de su mano, causandole un repentino dolor punzante que le hizo inhalar aire.
jRealmente dolia!
Antes de que se acostumbrara al dolor, la gruesa aguja fue arrancada de su mano.copy right hot pub —Lo siento, sefiorita Evrie, no he acertado con la posicién, intentémoslo de nuevo.—.
Evrie solo pudo fruncir el cesin decir una palabra, soportando el dolor.
Durante los siguientes minutos, Margarita intento varias veces sin éxito, dejando varios agujeros en el dorso de la mano de Evrie.
Finalmente, al acertar, Evrie dejo escapar un suspiro de alivio, sintiendo que su mano ya no tenia sensacion alguna.
Luego de cambiar el suero, no paso mucho tiempo hasta que la sangre comenzo a refluir, tifiendo de rojo el tubo del suero. Evrie estaba desconcertada —z Qué esta pasando?—
—Es una reacci6n normal, necesita bajar la mano un poco, aguante y estara bien — Margarita dijo esto sin inmutarse.
— ¢Cuanto mas debo bajar la mano?” — preguntd Evrie.
Evrie fruncié el ce—z Bajar la mano hasta el suelo también es parte de la reaccién normal que mencionas?—
Margarita sonrié —Asi es.—
Follow on Novᴇl-Onlinᴇ.cᴏm—¥ Lo haces a propésito, para molestarme?— pregunt6 Evrie mirandola directamente a los ojos.
Aunque no conocia a esta doctora, desde que habia entrado hasta ahora, todas sus acciones parecian malintencionadas y muy especificas.
Margarita alz6 una ceja —;, Dudas de mi como médica?—
Evrie replicé — Pero acabas de hacer varios intentos fallidos al pinchacon la aguja, 4cémo puedo confiar en ti?.
Se dispuso a pulsar el botén de emergencia, pero Margarita fue mas rapida y la bloqued.
~Acusandola de armar escenas?
Evrie no podia creerlo.
Margarita no miré la mano de Evrie, sino que fue directo al grano.
—gA quién quiere llamar, al Dr. Farel?— Margarita con sarcasmo —zEs que acaso quiere que él la atienda personalmente o intenta seducirlo?—
Evrie quedo perpleja.